Libro:
Mundo de cartón
Autor:
Gloria alegría Ramírez
Editorial:
Edebé (Don Bosco)
Clasificación:
Infantil
Valoración:
7/ 10
Al
hacer una mención a este libro es imposible no compararlo, en cierta medida,
con un grande de los clásicos de nuestra infancia. ¿Cuántos de nosotros no
fuimos testigos de las grandes aventuras y desgracias del inocente y dinámico
Papelucho, aquel gran personaje creado por la querida escritora Marcela Paz?
Mundo
de Cartón nos pone en la vida de Rafael, un pequeño de diez años, quien el día
de su cumpleaños recibe, por parte de su mejor y único amigo, un cuaderno para
usarlo de diario de vida. En el comienza a relatar todo lo que acontece en su
inestable realidad, los días en que él y sus hermanos pasan hambre, como su
hermana mayor comienza sus malas amistades en la calle, el esfuerzo de su madre,
quien trabaja día y noche lavando y planchando, para poder alimentarlos, el
miedo que sienten de que su padrastro, un conocido delincuente, termine
llevándose a sus pequeños hermanos, y la decisión que lo lleva a trabajar de
cartonero junto a su mejor amigo, un anciano que lo adentra al maravilloso
mundo de la lectura y la escritura.
Aunque
queda claro que el nivel socio-económico de Rafael está bastante muy por debajo
de la vida del querido Papelucho, sí se logra apreciar como sus personalidades
y maneras de pensar se entrelazan, debido al gran parecido en inocencia y en
edad de ambos protagonistas, y esto queda más que claro al momento de leer las páginas
del diario del pequeño, pues podemos notar la simpleza y la ingenuidad en sus
maneras de ver el mundo. Esto último, obviamente, un gran logro por parte de la
autora, quien logra el relato de una manera clara y sencilla, tal cual como si
estuviéramos ojeando el diario de vida de nuestro hermano pequeño.
Pese
a que el libro se cae en la poca profundidad que se le da a los personajes
secundarios que aparecen en el relato, centrándose más que nada en los que en
verdad hacen avanzar la historia, además de no lograr, en ciertos momentos,
manejar a buen ritmo los momentos de alto grado emotivo, sí termina siendo una
buena historia que divierte y encanta, fácil de disfrutar, un buen trozo de
lectura complementaria que debiera ser obligación en las escuelas en nuestros
años de inicio a la lectura y escritura, pues no solo posee el encanto de todas
las aventuras del pequeño de Marcela Paz, sino que también nos invita a conocer
las diferencias sociales que se nos presentaran en el mundo enseñándonos a
valorar lo que tenemos, por poco que esto pueda parecernos.
